Enero 15, 2021 Paola Díaz

El desinteresado acto de cuidar de uno mismo.

La pandemia nos enseñó que cuando uno se cuida a sí mismo, también cuida a la familia, los amigos y la comunidad. Aprende a hacerlo también en 2021.

Cuál es la lección más importante de la vida en pandemia? Yo diría que es esta: el autocuidado no es un acto egoísta.
Durante la COVID-19, hemos aprendido que todos estamos conectados, y que cuidarnos a nosotros mismos —mantenernos seguros y estar bien— es una manera de cuidar a nuestra comunidad. Tomar precauciones es una manera de evitar que nosotros mismos, nuestros seres queridos y nuestros vecinos se enfermen y de evitar que nuestro sistema de atención médica se vea colapsado.
Uno de los desafíos de 2021 será continuar haciendo del autocuidado una prioridad cuando la pandemia haya pasado.

Si siempre has dicho que no tienes tiempo para el autocuidado, o que el autocuidado parece egoísta y autoindulgente, no estás sola. “Una de las cosas con las que te encuentras todo el tiempo es la idea de que no puedo invertir en cosas que son buenas para mí, porque me quita la capacidad de ser un buena madre o de hacer lo que necesito en el trabajo”, dijo Kelly McGonigal, psicóloga de la salud y profesora de la Universidad de Stanford. “¿No sería estupendo que aprendiéramos a apoyarnos en nuestra interdependencia, y que pudiéramos tener algún tipo de alegría al saber que cuando me cuido a mí misma, a menudo también cuido a los demás?”.

Comienza el 2021 redefiniendo lo que es el autocuidado.

El autocuidado no es solo hacer tiempo para recargar las pilas con una siesta, meditación o tomar un descanso de la familia, aunque todas esas cosas cuentan.
El autocuidado en última instancia implica establecer prioridades, fijar límites y encontrar un propósito.
“Todo el mundo entiende que la relajación y el descanso son importantes”, dijo McGonigal, cuyo libro más reciente es The Joy of Movement. “Así que hay aspectos del autocuidado relacionados con el sueño, todo el mundo debe tomar un baño, encender velas. Existe esta idea de que necesitamos calmarnos. Pero, ¿qué puedes experimentar hoy que te llene de las emociones positivas que necesitas para hacer las cosas más importantes de tu vida? Se trata de reponer fuerzas para comprometerse con la vida”.

Como coach siempre es difícil convencer a la gente de que pueden dedicar tiempo al ejercicio y a otras formas de autocuidado.
“El cuidado personal es muchas cosas”, dijo Groppel, coautor de The Corporate Athlete: How to Achieve Maximal Performance in Business and Life. “Puede ser el ejercicio, crear límites. Es mantenerse a salvo emocionalmente. Tal vez no sea discutir con esa persona sobre política en este momento. Puede ser espiritual. Pero tú tienes el control de ello”.

Apóyate en el autocuidado

El autocuidado es diferente para cada una. Aquí hay cinco ejercicios de autocuidado para ayudarte a convertirte en una prioridad en el 2021. Escoge uno o pruébalos todos.

Dedícate las mejores horas de tu día a tí misma: Groppel a menudo aconseja a los clientes que planifiquen un día típico, desde el amanecer hasta la hora de acostarse. Probablemente pasas unas ocho horas durmiendo, pero ¿Cómo pasas las otras 16 horas? Escribe el tiempo que pasas preparando comidas, haciendo tu trabajo, comprando, viendo la televisión, lavando la ropa, ayudando a los niños con la tarea, cuidando a un padre anciano, poniéndote al día con los correos electrónicos.
A continuación, pregúntate: ¿En qué período de una o dos horas en cada día te sientes mejor? ¿Cuándo estás más energética? ¿Más productiva? Ahora mira tu lista. ¿Quién tiene esas horas? Intenta darte ese tiempo a ti misma mejor.
Darte la mejor parte del día no significa tomarte un descanso de dos horas de la vida. Significa concentrarte en tus prioridades, en vez de en las de otra persona. Puedes usar esa hora o dos para lo que quieras: puede ser para un pasatiempo, un proyecto de trabajo que te apasione, tiempo con tus hijos o incluso para ser voluntaria y ayudar a otros. Darte tiempo todos los días para centrarte en tus objetivos y valores personales es la forma definitiva de autocuidado.

Escoge una palabra del año: Elige una sola palabra que describa los objetivos, valores o estado de ánimo que quieres establecer para el 2021. El año pasado, elegimos la palabra “vitalidad”. No teníamos ni idea de lo relevante que iba a ser. Este año piensa elegir la palabra que mejor represente lo que quieres este año. Tu palabra puede ser cualquier cosa que te importe: comunidad, familia, ejercicio, amor, salud, energía. Usa tu palabra como un mini mantra a lo largo del año para recordarte que debes hacer del autocuidado una prioridad.

Crea un plan de descanso: Si eres la cuidador de alguien en la tercera edad, cónyuge enfermo o hijo discapacitado, el autocuidado probablemente se siente como algo imposible. Encontrar tiempo para el ejercicio, el apoyo espiritual o simplemente para divertirse es más fácil de decir , que de hacer. Si lo dejas al azar, el autocuidado no sucederá. Por eso es importante diseñar un plan de descanso familiar que identifique tus necesidades y deseos, así como los tipos de ayuda que otras personas pueden proporcionar. Convoca una reunión familiar o llama a tus amigos. Dile a todos lo que necesitas, no esperes que sepan automáticamente cómo ayudar

Ayuda a otra persona: Nuestros cuerpos y mentes se benefician de varias maneras cuando ayudamos a otros. Los estudios muestran que tener un fuerte sentido de propósito nos protege del estrés a corto plazo y predice una mejor salud a largo plazo. Si las formas tradicionales de cuidado personal te parecen demasiado centradas en ti, piensa en cómo ayudar a los demás puede ser bueno para tí. “También cobra el sentido de tener la responsabilidad de marcar la diferencia si puedes”, dijo McGonigal. “¿He defendido algo este año de una manera que podría haber sido de impacto? ¿Me permití participar en ese proceso que es más grande que yo?”.

Imagina el final de 2021: Uno de nuestros ejercicios favoritos es pedirle a alguien que imagine la vida un año en el futuro. Imagina que has hecho un cambio importante en tu vida por el que sentirías gratitud. Imaginar tu yo del futuro puede ayudarte a centrarte en actos positivos de autocuidado que puedes realizar ahora. Deja libre tu imaginación de veras.

¿Hay algún cambio al que te puedas comprometer?

¿Hay alguna parte de ti que quieras realmente aprender y crecer?

¿Puedes imaginarte estar agradecida con tu yo del futuro por hacer ese compromiso?.